Formato: Tapa blanda - Encuadernación encolada
Fecha: 17/2/2016
978-8-49112-323-1
MI OPINIÓN
"Operación Black Death" es una novela de factura impecable, con un envoltorio muy atractivo de aire cinematográfico que esconde una buena historia de espionaje, contrabando y cómo no, amor.
El trato:
Que yo me ponga a leer una novela con trasfondo bélico, encima en la Segunda Guerra mundial no es fácil, tiene que tener muchas cosas mucho más importantes que la contienda en sí y por supuesto no me puede llevar a campos de concentración detallados al milímetro, porque no voy. Y también hay condición con el final, que no voy a desvelar pero que es muy importante.
El autor, valiente donde los haya decidió que sí, que encajaba y que me podría gustar, así que me la mandó y acertamos los dos.
El argumento:
Tenemos de un lado pareja de hermanos españoles, Martín y Ana Eugenia, y a un americano, un inglés que no se sabe muy bien a qué se dedican ni de qué parte están aunque queremos pensar que son los buenos. Del otro están los de siempre y no vamos a perder tiempo con ellos. La cuestión es que unos y otros se hacen trampas, juegan con cartas marcadas y aquí el más tonto hace relojes por lo que es complicado saber qué va a pasar. De por medio tenemos obras de arte de esas que robaban unos para vendérselas a otros y armas químicas que pueden darle la vuelta al marcador en el momento más inesperado.
Y por supuesto la gran dama de la novela, la señorita Monique, que no se sabe muy bien tampoco de qué va, y que después de pasar las de Caín para llegar a España tras fugarse de una prisión las va a liar muy gordas.
Los actores:
Ahí están. Los personajes principales manejan más de un nombre cada uno y tienen diferentes funciones. Están dotados de gran vitalidad y dibujados con mucho acierto básicamente por sus obras más que por las descripciones que se limitan al plano físico. Sin ninguna duda el actor principal es Martín al que imaginamos tipo Bogart, ese canalla que cae bien porque en el fondo a lo mejor no es tan malo, o sí, nunca se sabe. Es sin ninguna duda el motor de la novela, el que va a mover toda la historia.
Monique le da réplica, misteriosa, dulce y fuerte al mismo tiempo es el tipo de mujer tan perfecta a la que incluso cuesta cogerle apego, provoca tanta irritación como envidia y en el fondo no quieres que le salga todo bien hasta que el tiempo la pone en su lugar.
Ana Eugenia es la más normal, un poco alcahueta en lo que respecta a su hermano Martín con el que a menudo adopta un papel adiestrador que no le favorece nada pero bueno, eso es algo personal, le tengo especial manía a la gente que acostumbra a decirle a los demás lo que tienen que hacer. Pero no es mala gente, es más, resulta mucho más natural empatizar con ella (el resto del tiempo) que con Monique.
Los demás: describirlos uno por uno sería destripar la trama y eso tendría que estar penado por ley, y más en el caso de historias como esta que viven de la intriga, el suspense y los giros argumentales. Pero sí hay que destacar que todos ellos son unos valiosos compañeros de viaje para el trío protagonista.
El director:
El autor maneja todas las herramientas narrativas del género negro con gran habilidad para construir una historia basada sobre todo en el suspense. Al principio es todo muy confuso y tengo que decir que arriesgado porque puedes pensar que este hombre no sabe lo que se trae entre manos, que todo se está enredando demasiado y corre peligro de acabar convertido en una maraña de subtramas llena de nudos que no hacen más que apretarse. No es así, y una vez superado ese desasosiego intermedio que produce no saber muy bien en qué jardín nos están metiendo, a medio camino ya tenemos claro cómo está repartido el asunto y se sigue con facilidad.
Y se disfruta mucho. Un narrador omnisciente en tercera persona va contando poco a poco esta historia que en muchos momentos recuerda a películas del estilo de Casablanca, dosifica la información para mantener el interés. Gracias a unas descripciones bellas incluso a ratos poéticas nos transporta a la España de postguerra civil-franquismo-y esa supuesta neutralidad respecto al conflicto mundial. Retrato muy especial en el que hace de los lugares, tanto de la ciudad de Bilbao como de Madrid, y algunos pueblos. Por suerte nos ahorra detalles cuando hay que tocar el tema delicado de campos de concentración, detenidos, actos violentos...
Especial mimo pone cuando se centra en la historia romántica, añadiendo un poquito de dulzor que no le sienta mal, incluso le da cierto aire a antiguo, casi a novela de Jane Austen, el casi habría que ponerlo en mayúsculas porque no es exactamente eso, por suerte. No tengo nada en contra de Jane pero es que aquí no pegaría nada. La historia resulta muy creíble, surge de una forma muy natural y fluye hacia su inevitable desenlace.
Dividida en cortos capítulos mantiene un ritmo y un tono constantes que se aceleran y que aumentan la tensión en función de la llegada de los momentos álgidos. Incluye también varios textos a modo de comunicados entre espías calificados de Secretos o Altos secretos que son al principio las partes más confusas y que no se entienden muy bien hasta que le coges el punto y aclara unas cuantas cosas.
De si existió o no tal operación y si ese tipo de armas químicas estaban en poder de alguien no tengo ni idea ni me importa, lo que me importa es que dentro de esta novela yo me lo he creído. Para lo demás, ahí están los libros de Historia.
Conclusión:
Restando esa parte (después del atractivo inicio ) en la que se va un poco a la deriva y hay que hacer ejercicio de confianza con la esperanza de que todo vaya encajando, estamos ante una novela que hará las delicias de los amantes de la historias clásicas de suspense e intriga con un poco de amor. Recomendadísimo para los aficionados al cine clásico de Hollywood, muy recomendable para todos los demás, incluso para los que como yo solemos evitar todo lo posible el tema bélico
Os dejo el enlace a la página donde podéis leer el inicio de la novela, animaos:
Operación Black Death
Puntuación: 4,5/5 Una pena que no haya nadie en el cine para hacer esto hoy en día, quizás Clooney pero está un poco mayor para el papel de treintañero, y Bogart, bueno, a ese le queda un poco a desmano. Las chicas como todas van al mismo cirujano tienen la misma cara y no darían el pego en la época.