- Traductor: Enrique de Hériz
- Tapa blanda: 296 páginas
- Editor: Roca; Edición: Translation (6 de mayo de 2004)
- Idioma: Español
- ISBN-10: 849628414X
- ISBN-13: 978-8496284142
"La esposa" es una novela con una narradora tan sincera y honesta que si te cae bien te quedarás hasta el final y la echarás de menos al acabar.
Lo que le pasa a Joan es muy habitual, se enamora de un profesor al que admira, el típico hombre deseado por demasiada gente y aunque esté casado ella no pierde su ocasión. Después le toca el típico, y ahora te aguantas por pedirlo, claro que ese aguante tiene un precio y un límite. De camino a Helsinki donde Joe recogerá un importante premio literario, Joan vuelve la vista atrás para explicar cómo fue su vida hasta ese momento y por qué ha llegado a tomar una importante decisión.
La narradora como digo es Joan, por lo tanto tenemos relato en primera persona. Es un estilo muy directo, sin adornos y llamando las cosas por su nombre, nada de ambigüedades, ni de dobles sentidos, y mucho menos maquillar la realidad. Solo quiere contar lo que le pasa y lo que siente. En un principio puede parecer que va a ser algo aséptico, o frío pero no lo es en absoluto ya que abrirse de esa forma es un acto de generosidad y de valentía. Valentía porque es muy fácil juzgarla y caer en la crítica, querer decirle eso de "mujer, cómo se te ocurre, hacer todo eso por un hombre que no se merece ni la mitad, que si el amor no es eso, y bla, bla, bla..." Pero es que no es fácil, cuando los sentimientos entran en el juego, todo se trastoca y por muy claras que estén las cosas, se van las normas al carajo y da igual que sean los años 50 o 60 del siglo pasado que es la que ocupa la parte del pasado de esta historia, o la segunda década del dos mil, siempre se cae en eso. La cuestión y en este caso es lo que nos mantiene en vilo es si se levanta o no.
Estamos ante una historia de renuncias, de una vida que se admite tal y como viene porque las otras opciones se antojan complicadas o simplemente imposibles. Meg Wolitzer nos deja un retrato muy claro, también sencillo como toda la narración, de la sociedad en la que le tocó vivir a los personajes, cómo estaba montado el tinglado de la clase universitaria y el papel de la mujer entonces.
Lo que más me ha gustado es que la protagonista no se queja en ningún momento, simplemente expone. Aunque hay más narración que diálogo, los que hay son muy contundentes y reflejan el carácter de los personajes. Estos personajes están vistos a través de los ojos de la narradora y en función de su relación con ella, su familia, el marido que hay que echarle de comer aparte, los hijos, otras escritoras...y el periodista.
Es una novela muy fácil de leer, sobre todo si decides creerte a Joan, es como tomar un café con alguien cercano pero que hace años que no ves y te pone al día con una sorpresa final en la que hay unas referencias literarias muy interesantes y también una parte importante sobre la creación literaria. El estilo me ha recordado mucho a Jhumpa Lahiri, a la guay, sí, la guay porque esta a veces también se tuerce y vaya tela.
Recomiendo el libro a los que gustan de dramas domésticos y de historias tan normales que tienen algo especial.
PUNTUACIÓN: 4/5
Por si alguien lo va a preguntar, la peli está bien sobre todo por Glenn pero no le llega al libro ni al lomo.