lunes, 28 de octubre de 2019

Cuentos macabros. Vol. II

EDGAR ALLAN POE & BENJAMIN LACOMBE


  • Traductor: Julio Cortázar
  • Tapa dura: 230 páginas
  • Editor: Editorial Luis Vives (Edelvives); Edición: 1 (31 de octubre de 2018)
  • Colección: Álbumes ilustrados
  • Idioma: Español
  • ISBN-10: 8414017266
  • ISBN-13: 978-8414017265
                                                          MI OPINIÓN
"Cuentos macabros" contiene algunos de los mejores relatos para pasar una noche terrorífica pero...

En este segundo volumen que recopila relatos de Poe hay un poco de todo. Un relato infumable que no se acaba nunca, otro que ni frío ni calor, uno bueno y dos geniales. En total seis historias en las que hay mucho terror en algunos casos, misterio e intriga en otros y un toque de lo que podría ser casi ciencia ficción. Acompañan como siempre las magníficas ilustraciones de Lacombe.

Los temas son variados, la muerte siempre está presente y también hay amor, ciencia y aventuras. Narrados algunos en primera persona y otros en tercera tienen todos el estilo propio del autor. Esa forma de contar con muchos detalles, con los que logra crear inquietantes atmósferas y a veces, lamento decir que pocas, unos niveles de tensión no aptos para quienes son sensibles a este género y luego tienen que ir encendiendo luces por toda la casa.  Consigue atrapar a los personajes tanto en lugares cerrados y pequeños como un sótano, como en otros grandes e inabarcables como el océano.
El estilo es recargado y con un vocabulario a veces poco habitual que te hace perderte un poco en las interminables párrafos, en especial, cuando la historia no ha logrado engancharte.

Los personajes son en su mayoría masculinos o sobrenaturales, tienen en común cierto desequilibrio mental y tienden a apoyarse en la botella más de lo conveniente. Se parecen mucho entre ellos pero están descritos desde el punto de vista físico hasta el más mínimo detalle. El aspecto psicológico es algo que se entremezcla con la trama y a veces da resultados maravillosos.

El que no me ha gustado nada ha sido el "Jugador de ajedrez", qué sopor para dilucidar si un autómata tiene un hombrecillo dentro o solo es una máquina. El siguiente más flojo pero que ya mejora bastante es el primero, que tiene un título muy raro y donde hay un caballo que no es de fiar. La "Conversación con una momia" es entretenido aunque no da miedo, tiene mucho diálogo algo filosófico pero sin aburrir. Lo único que no me ha gustado de "El rey peste" ha sido el final, que me esperaba apoteósico, ha quedado un poco soso para lo bien que está el relato que tiene una de las mejores ambientaciones.

Y aquí vienen los mejores: "Manuscrito hallado en una botella", una aventura agobiante, con una ambientación excepcional y que da mucho miedo y "Leonora" que es la historia de amor gótica más bonita que he leído nunca.

 De las ilustraciones tengo que decir que aunque mi objetividad con Lacombe es cero pelotero, reconozco que precisamente la de los relatos más sosos, también son más sosas y no me han emocionado, es como si el relato no le hubiera inspirado mucho y las hubiera dibujado con desgana. Y luego, las de los relatos buenos, son alucinantes, a veces hasta da la sensación de que se van a salir las figuras del dibujo. Aun así, aunque haya algunas muy buenas, creo que esta vez son pocas.
Lectura recomendada para adeptos al género de terror con paciencia y relatos y si te gusta mucho Benjamin Lacombe.

PUNTUACIÓN: 3/5 si no te gustaban los relatos, haberlo dicho.

lunes, 21 de octubre de 2019

La poeta y el asesino

SIMON WORRALL

  • Traductora: Beatriz Anson Echevarría
  • Tapa blanda: 360 páginas
  • Editor: Impedimenta; Edición: Unabridged (3 de junio de 2019)
  • Colección: Impedimenta
  • Idioma: Español
  • ISBN-10: 8417553223
  • ISBN-13: 978-8417553227
                                                                  MI OPINIÓN
"La poeta y el asesino" es una historia fascinante con dos personajes complejos y originales que enganchan al lector.

Daniel Lombardo se las promete muy felices tras comprar un poema manuscrito de Emily Dickinson en una subasta para la biblioteca en la que trabaja. Tras una llamada informando de que el poema es falso se le caen encima los palos del sombrajo pero el lector descubrirá una parte de la biografía de la autora y la fascinante historia del falsificador Mark Hoffmann.

El narrador nos cuenta la historia en tercera persona, una historia lineal que se divide en dos tramas. Al principio nos presenta un personaje que podía dar mucho juego pero que solo es el vehículo para contar la historia, después se centra en la vida privada de Emily Dickinson  para dar paso al personaje más enrevesado, el falsificador, que ocupa casi todo el libro.
Es un estilo muy cuidado y rico en vocabulario, y muy serio en el que abundan los detalles, descripciones pormenorizadas sobre falsificaciones, pruebas para comprobar la autenticidad, información sobre la historia de la imprenta y el acto de escribir.
No hay muchos diálogos pero el libro mantiene el interés por lo bien que explica las historias que componen la trama siempre y cuando te interese el tema. A mí siempre me han atraído mucho los orígenes de las religiones, quién, cómo y por qué las crearon pero siempre y cuando me lo cuenten de forma amena y en este caso es así. Si no te gusta el tema, este no va a ser tu libro porque la religión mormona ocupa bastante espacio.
Otro de los temas principales es el de la caligrafía, a veces incluso parece un CSI literario y me ha gustado mucho conocer cómo escribimos y por qué lo hacemos de una forma y no de otra. El mundo de las falsificaciones queda expuesto también con todos los detalles posibles.
Me ha resultado muy interesante también el tema de las subastas y me he enterado de los trapicheos que se traen entre manos grandes casas como Sothebys y Christies.

Me imagino que el autor ha hecho un gran trabajo de documentación y parece apasionado con el tema, ha usado como cebo un personaje tan atractivo como Dickinson pero lo ha hecho bien, le ha dado un buen sitio dentro de la historia y lo ha humanizado.
Pero sin duda alguna, el eje del libro es Mark Hoffmann, el falsificador. Menuda pieza. Pero es lo que también mantiene al lector dentro de la novela, siguiendo sus pasos, ver cómo poco a poco va complicando tanto la cosa que cuesta ver por dónde va a salir. No es un personaje tan complejo como pudiera parecer porque además se centra sobre todo en lo que hace, que ya es bastante y menos en cómo es.
No es una novela de ritmo rápido pero tampoco tiene atascos ni pausas. También hay que decir que hay que estar atentos porque entran en juego muchos nombres, datos y tramas que aunque están bien desarrolladas pueden hacer que te pierdas si te distraes.

En definitiva, un libro ideal para amantes y/o frikis de la literatura, que tengan algo de querencia por Emily Dickinson y que tengan sosiego para leer.

PUNTUACIÓN: 4/5

lunes, 14 de octubre de 2019

La muerte del comendador. Libros 1 y 2.

HARUKI MURAKAMI

 Antes de empezar la reseña tengo que aclarar que he decidido traer los dos libros en la misma reseña porque me parece fatal y me ha cabreado mucho esto de que los publiquen casi a la vez pero separados y hacer al lector comprar dos libros para leer una historia y gastarse más de 40 pavos, lo que viene siendo un atraco a mano armada. Si los escribió juntos pues que los publiquen juntos. Así que en rebeldía no le voy a hacer dos reseñas, una y gracias. Que eso no se hace, que si el libro entonces hubiera quedado muy gordo pues y qué, a los lectores de verdad nos da igual, y los que llevan el libro a la playa para apoyar la cabeza no creo que compren a Murakami.
                                                           
     Libro 1.                                                                         

  • Traductores: Yoko Ogihara y Fernando Cordobés     
  • Tapa blanda: 480 páginas
  • Editor: Planeta; Edición: 1 (9 de octubre de 2018)
  • Colección: Andanzas
  • Idioma: Español
  • ISBN-10: 8490665648
  • ISBN-13: 978-8490665640
     Libro 2.



  • Traductores: Yoko Ogihara y Fernando Cordobés
  • Tapa blanda: 491 páginas
  • Editor: PLANETA PUB; Edición: Translation (12 de febrero de 2019)
  • Idioma: Español
  • ISBN-10: 6070755383
  • ISBN-13: 978-6070755385
"La muerte del comendador" es una novela que trae lo mejor de Murakami, una buena idea, misterio, un entorno onírico, personajes creativos desnortados con más relleno que el edredón nórdico de invierno.

Un hombre, retratista y recién divorciado decide irse a una cabaña perdida en el monte a lamerse las heridas que le ha hecho la mujer a la que amaba y otras del pasado que no han podido curar. Llegan entonces personajes que vienen a darle vidilla, una mujer con ganas de jaleo y un hombre misterioso que parece que solo quiere un retrato. Al mismo tiempo suceden cosas extrañas y aparece un cuadro raro que van a tener al protagonista en un sinvivir y en una aventura de esas surrealistas con sello Murakami.

El narrador es el protagonista, el que cuenta absolutamente todo lo que le pasa, lo que piensa y lo que siente. Eso está bien para conocer al personaje pero a veces se pasa de vueltas y llega a aburrir un poco, es algo pesado. El estilo es muy elaborado, tira mucho de metáforas, y tanto practicar es lo que tiene, se le dan especialmente bien y algunas son además de acertadas, muy bonitas. Crea atmósferas para lo que se vale de todos los sentidos, y así consigue meter al lector en su particular mundo. Hay más de monólogo y narración que diálogos pero los que hay son interesantes, vivos y hacen avanzar una trama que en su hilo principal es magnética y atrapa casi desde el principio.
El resto de tramas, algunas complementan la historia principal y otras son totalmente innecesarias.

A este autor la novela larga no le sienta bien, no se le da bien o a mí no me gusta, puede que ambas cosas a la vez, pero me da la sensación de que se vuelve repetitivo y empieza a contar cosas que no interesan y no aportan nada. Me gusta cuando refleja lo cotidiano, porque le da cercanía y familiaridad pero aquí se pasa y aburre un poco, tanto ahora me levanto, me acuesto, escupo, cocino, como, me estiro... y encima me da la sensación de que lo ha hecho para que la cosa le dé para dos libros y sinceramente, creo que ha pifiado con eso. En especial en el primer libro.

Los personajes son interesantes, están retratados con gran precisión y minuciosamente aun teniendo lógicamente su parte desconocida para el narrador. Tengo que decir que comprendo a los personajes  pero no suelo empatizar con ellos, que me caigan bien ya es para nota. Pensándolo bien es que ni Murakami me cae bien y diréis, sí claro, como lo conoces de tomar café todos los días con él... pues no, no lo conozco de nada y sinceramente tampoco es un autor que me interese, me decepcionó con su "De qué hablo cuando hablo de escribir". Pero me gusta mucho cuando escribe bien sin llenar las novelas de morralla.

Como todo el mundo ya se imagina, en el libro primero suceden menos cosas y se detiene más en descripciones y presentaciones para luego ir elaborando la trama que en el segundo ya coge un buen ritmo y suceden cosas extraordinarias.
Para que te guste este autor tienes que comulgar con sus rarezas, leer dispuesto a admitir que cualquier cosa puede pasar y que es real. Como empieces a sacar punta con la lógica y tomártelo por el castellano recto acabarás por tirar el libro.

Esta historia está llena de símbolos, de ideas, de arte, de creación y todas juntas forman una especie de cuento con un final en el que sucede algo que no me gusta nada pero por lo demás cierra muy bien la novela. No sé cómo pero todo tiene sentido.

Libro para los que ya conocen al autor y se entienden con su hacer.

Si alguien va a preguntar si es necesario leer el primer libro o se puede leer solo uno, pues hombre, poder, lo que se dice poder, pues puedes hacer lo que quieras pero es como si coges una novela cualquiera y preguntas si hay que leerla entera o solo la mitad.

PUNTUACIÓN: 4/5 si la idea de partir el libro en 2 ha sido tuya, ya estás haciendo muchas cosas que no me gustan.






lunes, 7 de octubre de 2019

Los crímenes de Alicia

GUILLERMO MARTÍNEZ


  • Tapa dura: 336 páginas
  • Editor: Planeta (5 de febrero de 2019)
  • Colección: Áncora & Delfin
  • Idioma: Español
  • ISBN-10: 8423355101
  • ISBN-13: 978-8423355105

                                                      MI OPINIÓN

"Los crímenes de Alicia" es una buena idea con muchos atractivos tirada por la ventana.

G. estudia en la Universidad de Oxford, y por uno de esos azares literarios acaba envuelto junto con su mentor en un caso cruento y delicado en el que se pone en juego la figura de Lewis Carroll, y la vida de algunos miembros de la Hermandad dedicada a este autor. Todo se desencadena cuando una estudiante encuentra un trozo de papel que falta en un diario del célebre autor.

Es el propio G. el que cuenta la historia, pero en realidad es que no cuenta nada. Es un claro ejemplo de que tener una buena mano no significa que vayas a ganar la partida. Aquí había de todo, misterios, una localización bucólica y atractiva, Lewis Carroll y literatura, un caso muy actual y crímenes por resolver. Pero claro, eso también me lo puedes dar a mí y no te hago un novelón, hay que saber hacerlo y para mí, el autor no ha sabido.

La narración es muy pesada, está llena de palabras que no hacen avanzar la trama porque lo mismo se repite una y otra vez. Después de un inicio que promete ya que pone sobre la mesa una propuesta interesante, la trama se empoza y hay páginas y páginas de repetir siempre lo mismo, tanto en la parte de acción y narración como en los diálogos porque cada vez que un personaje se entera de algo se lo cuenta a otro y vuelta a empezar.

Y de vez en cuando pasa algo, alguien muere y entonces parece que vamos a arrancar pero no. Porque para intentar explicarlo, los personajes tratan de usar el método deductivo y como no tienen nunca nada nuevo, pues más de lo mismo por si no te habías enterado en las veinte veces anteriores.

Los personajes ni siente ni padecen, no les corre sangre por las venas, ni tinta (por si alguien va a venir a hacerme el chascarrillo). Son intercambiables en el sentido de que lo único que diferencia uno de otro es el nombre. Aunque tengo que decir que hay una página que me sorprendió mucho, parecía que la habían cogido de otro libro y la habían metido en este por error, porque me conmovió. Porque el personaje narrador siente, y lo expresa y encima lo hace muy bien. ¿Por qué no siguió por ahí? No lo sé, pero no se vuelve a repetir. Y como son así, pues muere gente de forma más o menos macabra y les da lo mismo y ellos a lo suyo.

El caso es que la trama está cogida con pinzas, pero pinzas rotas y se cae todo el tiempo. Es imposible creérsela. Me da igual que una historia sea verosímil o no, pero con lo que no comulgo es con la falta de credibilidad por disparatada que sea.

El final es una bocanada de aire y sin ser bueno es quizás de lo mejor del libro. Como los personajes no son capaces de poner pies en pared, el culpable escribe una carta y lo cuenta todo. En muchas ocasiones y en esta también las cosas están metidas con calzador para que la historia vaya por donde tiene que ir y no por donde iría de forma natural.

Lo de los premios literarios es como los Reyes Magos, por mucho que nos pese, a cierta edad lectora, ya no creemos en ellos pero vaya, el Nadal aunque es como el otro, solía tener más calidad y no este tufo a libro de encargo escrito para esto. No puede ser que este fuera el mejor libro que se presentó al concurso.

PUNTUACIÓN: 1/5