lunes, 25 de febrero de 2019

Sabotaje

ARTURO PÉREZ-REVERTE


  • Tapa dura: 376 páginas
  • Editor: ALFAGUARA; Edición: 001 (3 de octubre de 2018)
  • Colección: Serie Falcó
  • Idioma: Español
  • ISBN-10: 8420432458
  • ISBN-13: 978-8420432458


                                                                         MI OPINIÓN
"Sabotaje" es puro cine negro clásico, un rompecabezas que mete al lector en la historia hasta el final en el que todo encaja perfectamente.

En este caso, el tercero y creo que último, a Lorenzo Falcó le hacen doble encargo, lo mandan a París a joderle un cuadro a Picasso por comunista y prepararle el último viaje a un tal Leo Bayard. Visto así no dice mucho pero es que lo único que hay que saber es que esta es una novela de espionaje, de las clásicas, donde se arreglan las cosas con inteligencia, maña y fuerza también y por qué no decirlo, algún que otro golpe de suerte.
El contexto político está ahí como base de todo, plena guerra civil española y una mundial que se viene encima, solo con los detalles necesarios para darse cuenta de la situación pero sin entrar en la descripción de penurias. Los personajes pertenecen a un bando de distintos países, o a dos o tres según convenga. La ideología de cada uno está pero de refilón,  en realidad son como mercenarios, hace mucho que perdieron sus sentimientos si es que alguna vez los tuvieron. No ven personas, ven piezas. Es un juego para ellos.

Lo mejor sin duda de estas novelas es la ambientación, el narrador omnisciente en tercera persona nos abre la puerta, es como traspasar una pantalla de cine y entrar en la película, oyes los pasos, sientes el viento, el frío. Mención especial se merecen esos locales de ambiente asfixiante, donde corre el alcohol, el humo asfixia y la música embriaga. En esta ocasión nos lleva a París y nos pasea por sus calles y lugares emblemáticos como el Deux Magots, la orilla del Sena y hoteles de lujo.

Los personajes son puro cartón piedra. NO es una pega, es que son así, huecos, ni sienten ni padecen, les da lo mismo detrás que en la espalda y se mueven por puro instinto.  Pero forman parte de una historia tan interesante y bien tramada que es imposible dejarlos, además si no fueran así, no funcionarían dentro de una trama como esta. Tengo que destacar a uno de ellos, Eddie, que ha sido mi favorita en esta ocasión. Con Falcó no me voy a cansar, ya sabemos lo que es, cada vez que al hablar de una mujer se refiere a ella como hembra me da un retortijón. Vuelven a ser todas ultrafemeninas, atractivas, con el típico aire a femme fatale aunque alguna no lo sea, caen como moscas en la red de Lorenzo y bla, bla, bla.

El ritmo es constante y se apoya sobre todo en el diálogo, hay apenas unos párrafos de narración, lo justo para algunas acciones y para describir lugares y personajes. La descripción física de ellos es muy sencilla y es la carta de presentación cuando aparecen por primera vez, el carácter nos lo da el diálogo y su forma de actuar.
Al principio puedes perderte un poco con tanto personaje apareciendo a la vez, bandos e intereses así todos mezclados pero es cuestión de un poquito de paciencia poner orden y disfrutar.

Me ha gustado mucho esta última (creo) entrega, una trama que queda muy bien redondeada, en la que hay un espacio reservado para la cultura y el cameo de ciertos personajes históricos reales.  Con un final poético que le ha sentado fenomenal.

PUNTUACIÓN: 4,5/5 no la vendas por favor, habría que resucitar a mucha gente para hacer la peli y no se puede.

lunes, 18 de febrero de 2019

Qué verde era mi valle

RICHARD LEWELLYN



  • Traductor: Pedro Ibarzábal
  • Páginas: 417
  • Formato: Tapa dura con sobrecubierta
  • Editorial: Mundo Actual Barcelona (1980)
  • ISBN: 8474541298
  • ASIN: B00CL9NHYE

                                                                 MI OPINIÓN
"Qué verde era mi valle" es la historia melancólica y amable de una vida y una época que han llegado a ese punto del que ya no se puede volver.

Huw Morgan mira al valle que representa lo que él siente que es y vuelve la vista atrás para contar su historia.
Es por tanto el encargado de narrar todos los acontecimientos que han marcado su existencia desde la infancia hasta el momento en el que se prepara para partir llevándose un montón de recuerdos.
Es una narración sencilla en la que a veces (pocas) se dirige a sus lecotres tratándoles de usted. El ritmo y el tono hacen que la lectura sea de las que sosiegan,  y esto no quiere decir que sea lento sino que las cosas suceden de forma natural y se toman el tiempo necesario para que sean reales y creíbles.  
Es una historia lineal que tras la presentación inicial vuelve a la infancia del protagonista. Es la época en la que más se detiene y que sirve de entrada al lector en el hogar de los Morgan. Familia numerosa, dedicados a la minería y donde aunque todos sean del mismo padre y la misma madre son completamente distintos aunque a veces se ponen de acuerdo en ideales o en decisiones. 

La ambientación es muy efectiva, describe lugares con mucha pulcritud y numerosos detalles que hacen que además sea bonita de leer, sin llegar a ser poética ni recargada. El valle minero de la región de Gales es el escenario principal, pero presta también especial atención a lugares públicos, la mina, la escuela y por supuesto, al interior de las casas para reflejar una forma de vida.

Y de la misma importancia va a ser la parte política con las huelgas y protestas ante los cambios en la minería. Esta parte era la que me daba pereza y me hacía rehuir la lectura pero ha merecido la pena el desafío porque está contado de forma muy amena y sin abusar.
También el retrato social , las clases, la religión y la cultura van a tener mucho peso ya que va a condicionar la actitud de los personajes y muchas cosas que pasan. 

Pero sin ninguna duda lo que mueve de verdad esta novela y la hace especial son sus personajes. El principal desde luego es el que se va a hacer el más querido, es que le vemos crecer...es imposible no tomarle cariño, es como de casa. La forma de mostrar todos sus sentimientos, pensamientos e inquietudes al lector es impecable, se abre aunque conserva cierta distancia, frialdad pero retrata a la perfección esa etapa de la vida en la que todo tiene solución, siempre hay alguien que lo va a solucionar sea cual sea el problema, las sensaciones van de un extremo a otro, el descubrimiento. Pone palabras donde muchas veces es muy difícil y a partir de cierto momento, el amor será el centro de la historia.  A los demás los conocemos a través de sus ojos por lo que es una opinión sesgada pero igual de válida. El personaje de la madre es otro de los grandes de la novela. Y el resto son también muy buenos y aunque algunos son arquetipos, eso es solo la cáscara, vale la pena averiguar el interior. La única pega que les pongo es que algunos de ellos tienen unos nombres terribles, difíciles de situar al principio y que sinceramente, no sé cómo se pronunciarán.

Tiene muchos diálogos donde es tan importante lo que se dice como la forma de decirlo y que una vez más te hacen parte de la novela. También algunas reflexiones y un final precioso y conmovedor

En conclusión,  una novela clásica que enriquece, que te gusta más de lo que pensabas porque se te han pasado montones de páginas y horas sin que te hayas cansado de leer.

PUNTUACIÓN: 4/5

lunes, 11 de febrero de 2019

La novia gitana

CARMEN MOLA

  • Tapa blanda: 408 páginas
  • Editor: ALFAGUARA; Edición: 001 (17 de mayo de 2018)
  • Colección: ALFAGUARA NEGRA
  • Idioma: Español
  • ISBN-10: 8420433187
  • ISBN-13: 978-8420433189
                                                                MI OPINIÓN

"La novia Gitana" es una novela que atrapa desde la primera página y no suelta hasta la última con una trama que se retuerce demasiado y pierde consistencia.

Tenemos cadáver, asesino con todas las papeletas para acusarlo de repetir tropelía pero que estaba ya en la cárcel, inspectora traumatizada con compañero súper espabilado pero poco ortodoxo y un puñadito de sospechosos. 
La novela negra no es mi fuerte pero de vez en cuando cae alguno y por eso escojo aquellos que me parece que tienen algo especial. Aquí lo he encontrado pero a medias.

La narración es muy sencilla porque hay mucho que contar, así que vamos en línea recta a partir de la aparición del cadáver de Susana Macaya. Presenta signos de tortura, una tortura que puede revolver las tripas a lectores súper sensibles. No es agradable de leer pero a favor de la autora hay que decir que no se recrea en ello ni lo repite más de lo necesario, solo lo justo para ir resolviendo el caso.
Y precisamente el caso es lo que atrapa al lector ya que tiene alguna cosa especial, la asesinada es gitana y además su hermana también había sido asesinada años antes de la misma forma. Enseguida empiezan los investigadores a tener datos por lo que el lector no tiene tiempo de aburrirse.
Es un narrador omnisciente en tercera persona con un estilo muy directo, sin adornos, con muchísima acción y diálogos que no decae en ningún momento.
Se abren varios frentes, aparecen unos cuantos sospechosos y mete cosas interesantes como el tema snuff movies (que no existen)o el componente cultural por ser la víctima de etnia gitana....
Aparte tenemos el trauma de la inspectora Elena y unos fragmentos en cursiva que nos hablan de algo que ocurrió en el pasado de alguien que no sabremos qué pintan casi hasta el final.

Y aquí es donde aparece uno de los tres problemas que me he encontrado en esta novela. Toca demasiados palos y no todos suenan bien. Creo que ha querido darle tantas vueltas y meter tantas cosas que algunas se han quedado en el camino y si te pones a pensarlas a veces no tienen consistencia. Queda raro. Sé que tanta sorpresa y tanto evento dramático junto es lo que precisamente le gusta a muchos lectores pero a mí me parece que se le ha ido la mano.

El segundo punto es el personaje principal. Creo que para crear un personaje femenino hay que hacer algo más que ponerle nombre de mujer. Supongo que la hizo tan masculina sobre todo en forma de pensar  para que pareciera más moderna, ese tipo de mujer que nos quieren vender ahora como la actual, la que va por la vida sin necesitar de nada ni de nadie por encima del bien ni del mal y que solo tiene sentimientos para consigo misma y pocos. Directamente es un personaje que no me ha gustado,  no porque me caiga mal, que también, sino porque no me la he creído. Tiene un soberano problema con el alcohol que por supuesto no le quita ni un ápice de agudeza, ni reflejos ni interfiere en su vida laboral. Va al karaoke a desfogar, algo que me parece bien, pero valora a los hombres como si fueran ganado y se apaña luego sin compromisos y sin sentir ni padecer.
Su trauma del pasado sí tiene sentido al igual que la forma de enfocarlo y su actitud y eso es lo que no se sostiene con lo demás. 
El resto de personajes están para cumplir su función y ejercen su papel con eficacia. Pero todo es frío y superficial aunque al mismo tiempo cuenta cosas muy íntimas y ahí es donde también me cojea el asunto. Es que si entras, entra con todo, hasta la cocina.

Y la tercer problema ha sido el tsunami de clichés y tópicos que se me ha venido encima. Vale que haya elementos comunes y tradicionales del género, de hecho tiene que haberlos pero vaya, esto es otra cosa y es una pena tanto lío con la trama por hacer algo diferente para luego estropearlo así. 

El caso se resuelve más o menos bien y queda claro quién fue el asesino y por qué, es más, si lo hubiera dejado estar y no hubiese sacado cosas de la chistera haciendo más carambolas que el irlandés ese que juega al Snooker (uno que es capaz de meter todas las bolas en un solo turno y no me acuerdo cómo se llama) le habría subido la nota. Pero creo que por un lado ha querido hacer algo como más épico y por otro dejarse la puerta abierta para continuación que sale en abril, La red púrpura, que sea una o trescientas supongo que dependerá de los números.

En resumen, lectura muy entretenida que empieza muy bien pero que se cae de la mitad hacia el final con un personaje que me da urticaria. 

PUNTUACIÓN: 2/5 tú eres alguien de la tv.

lunes, 4 de febrero de 2019

Lagartija

BANANA YOSHIMOTO


  • Traductor: Gabriel Álvarez Martínez
  • Tapa blanda: 160 páginas
  • Editor: Tusquets Editores S.A. (7 de noviembre de 2017)
  • Colección: Andanzas
  • Idioma: Español
  • ISBN-10: 8490664668
  • ISBN-13: 978-8490664667

                                                                    MI OPINIÓN
"Lagartija" es una colección de momentos cruciales en forma de relatos llenos de sensibilidad, ternura y esperanza.

Sé que los recelosos de los relatos ya han salido corriendo, un día vais a tropezar por ir tan rápido, luego vendrá el llanto y el rechinar de dientes. En fin, para los que se quedan tengo que decir que estos relatos tienen en común el descubrimiento de una respuesta a la búsqueda de un significado de la vida. Es un libro repleto de espiritualidad, en todos ellos se parte de un suceso, un hecho que cambia la visión que tiene el personaje protagonista en cada uno de la vida. Y lo hacen centrándose en el amor, en el sexo, el trabajo, en los recuerdos...según cada relato.

El estilo es el mismo en todos ellos, el propio de una autora que es de mis favoritas en lo que a oriental se refiere, por delante de Murakami que a veces no sé de qué va, con ella siempre me entiendo. Es de esas autoras con la que sientes que conectas y que aunque a veces sea un poco extraña por motivos culturales, sabes de lo que habla. Es un estilo directo pero amable, no esconde lo duro de la historia pero no busca noquear al lector con la crueldad ni tirándole la realidad a la cara con rabia, sino que la muestra,  honestamente y dejando siempre esa famosa grieta por la que siempre se cuela la luz (gracias infintias, Cohen).

Son todos cuentos en los que predomina el simbolismo, tanto en lo que se refiere a trama como a descripciones y reflexiones de los personajes. En las descripciones a veces he echado de menos algunos elementos que formaran la imagen del lugar con más exactitud. Está claro que ella escribe con su forma de pensar, y de la misma manera que un occidental no se detendría a describir al detalle lo que es una iglesia pues ella no se para con los templos o lugares que nombra dando por hecho que cualquiera los conoce.  Aunque también es cierto que esto no supone un problema para disfrutar de la lectura porque si bien en las descripciones físicas de lugares se queda corta, la creación de atmósferas es de matrícula de honor. Es increíble cómo logra conmover al lector y hacerlo sentir algo de lo que sienten los personajes y dentro de ella, hace que desaparezca todo lo que te rodea.

Y los personajes son complejos aunque ella los muestra de forma sencilla. Hace referencia a su aspecto solo si va a tener alguna importancia en la historia o en lo que quiere transmitir. Pero se detiene en su forma de sentir y pensar, en eso no escatima absolutamente nada y los muestra con todo detalle, los convierte en seres humanos de carne y hueso con los que es fácil empatizar.

No podía faltar el toque mágico de la literatura oriental. Ahí es donde Banana Yoshimoto se muestra soberbia, tiene un don para hacer que ese sentido sobrenatural cuadre perfectamente con la realidad, es imposible no creerla. Y es imposible no sentirse arropado por esa magia, por ese mundo que viene a suavizar y a dar luz. No es tampoco nada que lleve al extremo de lo surrealista, es a veces solo un toque sutil.

Solo hay seis relatos. Digo solo porque aunque a ninguno le falta ni media coma, lo peor de los relatos de esta autora es que siempre te deja con ganas de seguir leyendo más, más cuentos.
Mi favorito sin duda es "Sangre y agua", una historia de amor del que salva y ayuda a caminar y a sobrellevar las huellas del pasado.
 El que menos, La espiral, en el que el personaje principal intenta olvidar de una forma un poco bestia. En este, le ha dado por poner los pies en el suelo, y no le pega mucho, para narraciones tan realistas prefiero otros escritores, un tal llamado Paul que anda por Brooklyn es uno de ellos, pero a Yoshimoto le ha quedado demasiado ácido y como apagado.
Y en el medio y con muy buena nota todos los demás, me rindo ante la ternura de "Lagartija" con su punto de thriller y secretos muy duros, el sabor a cuento navideño aunque no sea en esa época, de "Recién casados",  y "Soñando con Kimchi", sobre las relaciones, el valor de lo cotidiano frente al riesgo de lo siempre nuevo.

En conclusión, unos relatos para dejarse mimar por la literatura y para dejar de decir: es que yo no soy de relatos.
(Oye, que yo a veces cedo y leo cosas de la Segunda Guerra mundial).

PUNTUACIÓN: 4,5/5 haz una novela de 700 páginas.