- "Sobrevivo en una grieta en la que apenas puedo respirar; soy como una rosa que agoniza entre las sombras de sus pensamientos."
- Traductora: Catalina Martínez Muñoz
- Tapa blanda: 250 páginas
- Editor: Gatopardo Ediciones; Edición: 1 (27 de noviembre de 2017)
- Colección: Gatopardo
- Idioma: Español
- ISBN-10: 8494642561
- ISBN-13: 978-8494642562
"Invierno" es un caramelo envenenado, que necesita de paciencia y confianza pero que recompensa al lector con una historia emotiva y profunda.
En el libro cuentan la historia de tres personajes, Florence que es la actual mujer de Hardy cuando la actriz Gertrude entra en sus vidas para interpretar personaje de Tess. Hardy buscará una quimera y para eso irá dejando "cadáveres" por el camino, Florence quiere vivir y sin embargo se asfixia, sabe por dónde tiene que sacar la cabeza para respirar pero no puede y Gertrude que pasaba por allí es la que monta el lío sin querer.
Coger a Thomas Hardy para que sea protagonista de tu novela es partir con ventaja, sabes que te vas a encontrar muchos lectores predispuestos a darte la oportunidad pero esos lectores solemos ser los más exigentes porque también somos los más locos. Pero si lo acompañas de un personaje como Florence, que se escapa de la sombra del protagonista, y alguien que también se hará un hueco y equilibra el tema como es Gertrude, te los llevas de calle.
Son ellos los que van a hacer que el libro se te cuele dentro, en especial Florence. Ella misma cuenta su parte de la historia, cómo la vive y sobre todo cómo la siente. Es muy fácil de comprender en su sufrimiento y en su imperfección. Es intensa, incluso a veces llega a ser cruel consigo misma cuando empieza a no tener nada que perder. Se rompe en millones de pedazos y en cada uno de ellos deja frases y párrafos memorables, que te conmueven y te hacen sentir muchas cosas diferentes hacia ella y a través de ella. Llegas a conocerla mejor que ella misma e incluso puedes entender lo que hace, puede que incluso tú hicieras lo mismo aunque viéndolo desde fuera pienses que no.
La perspectiva de Hardy la conoceremos a través de un narrador omnisciente, en tercera persona, un observador que a ratos es demasiado aséptico pero también aporta descripciones detalladas, minuciosas que crean postales bucólicas y proporcionan el contexto político y sobre todo social de la época, la década de los 20 en la Inglaterra rural. De mano, esta era la parte que pensé que más me iba a interesar pero no ha sido así. Primero porque Hardy, personaje magnífico al que no se le puede poner tacha, no me ha caído demasiado bien, tiene parte de razón en algunas cosas que hace y dice, puede que en algunos momentos incluso me haya hecho sentir lástima pero muchas veces tenía actitudes de llevarse las manos a la cabeza y de pensar: yo con este no me tomaba ni un café, no iba ni a una presentación de su libro. Pero es justo reconocer que es muy interesante, da que pensar, y sí, era muy bueno escribiendo.
Tenemos un último narrador, otra vez volvemos a la primera persona con Gertrude, que habla poco pero cuando habla, o más bien, cuando escribe, sube el pan. Vamos, que debe tener si no me equivoco dos capítulos pero son los que le dan sentido a la novela y la completan. Sus pasajes están llenos de simbolismos, de gestos significativos y son los más bonitos, son los que te hacen cerrar el libro y decir esa frase tan elaborada: "qué guay."
Hay más personajes para completar, secundarios a la altura de la trama, bien desarrollados aunque no tienen apenas protagonismo, en realidad, lo que hacen es opinar. Son bastante majos todos ellos, amigos y familiares.
El estilo del autor recuerda a las novelas clásicas, contándote cada crujido de rama que pisa el personaje, el color de las sábanas, miles de detalles sobre los adornos de la casa y el juego de té, te habla de la calidad del tweed, dios, ¿qué.... es el tweed y por qué todos los personajes de todas las novelas british lo llevan? Cuando vaya a U. K. tengo que entrar en una tienda de ropa y pedir una chaqueta de eso solo para ver lo que es. Es como los rododendros, ¿todo el mundo sabe lo que es eso?
En fin, lo que quiero decir es que se toma su tiempo para entrar en la trama, es como si pusiera al lector a prueba, primero supera esto y luego te ganas mi confianza y te lo cuento todo. Es justo decir, que el esfuerzo vale la pena, incluso el camino vale la pena porque son como paseos y ves lugares diferentes que no conocías. Ayuda a hacerse una imagen muy viva del lugar, termina por ofrecerte un asiento a su lado en el sofá. Si vives en la campiña inglesa pues lo mismo no te hace gracia, pero para los que somos de asfalto y de otra cultura, tiene su encanto.
Y llega el final, y es lo mejor de todo. Le pone un broche perfecto, queda muy claro el mensaje, y todo lo que ha sucedido tiene su razón de ser, y te das cuenta de que no había podido ser de otra manera.
Recomendado si te gustan las historias cocidas a fuego muy lento, viajar a otra época, y conocer personajes de los que vas a saber los sentimientos y pensamientos más profundos e inconfesables acerca del amor, la amistad, el tiempo, la muerte y la pasión.
PUNTUACIÓN: 4/5 Muchas gracias a Papá Noel que me lo trajo por Navidad sin pedírselo.
Mira en esta ocasión no me animo, lo que es antes de leer la reseña en sí, por sinopsis etc no es que me atrajera demasiado. Pero tras leer la reseña lo que más curiosidad me ha dado es el final y la narración, pero aún así me falta algo para animarme
ResponderEliminarUn beso!
Es que es un libro muy "tranquilo", muy bonito y merece la pena pero tiene que apetecerte el tipo de lectura que es. Sé lo que dices. Un beso!
EliminarPues yo, si hay tweed, me lo llevo. ;) El tweed, si es bueno, es una maravilla. Es un tejido hecho con lana muy apretadita. Eso hace que además de ser calentito y sin ser elástico tenga un poco de juego. Se lo inventaron los escoceses, que hacía mucho frío pero querían ir monos (ya salió la apasionada de la moda que llevo dentro). Pues sí, Thomas Hardy como protagonista nos gana, pero eso de que requiere paciencia... Que no estoy yo ahora para libros que pidan paciencia, que necesito libros que no me hagan pensar, de esos que pasan como una onza de chocolate.
ResponderEliminarBesos, Norah Bridehead
Muchas gracias por la info, ahora entiendo por qué la afición a ese tejido. Hay tweed y té, teatros y paseos por la campiña.
EliminarPensar y reflexionar sí, hace falta un poquito, no se puede pasar por encima porque de esa forma no te dirá nada.
Esta Florence te iba a gustar mucho también.
Besos
¡Hola! Me gustan algunas historias cocidas a fuego lento, como las que suelen contar las novelas de autores japoneses, pero otras consiguen aburrirme, nunca llego a saber a ciencia cierta la razón, de que algo no acabe de engancharme
ResponderEliminar¡Vaya con Gertrude! Con tan solo dos capítulos y consigue completar la novela. Molan ese tipo de personajes, son los más interesantes
Besos
Ay no, no es esa quietud llena de significados que tienen los orientales, es solo algo sencillo y muy reflexiva.
EliminarLa Gertrude es que habla y sube el pan. Tiene fuerza pero no supera a Florence.
Besos
He leído alguna que otra reseña de este libro (pocas) y junto con la portada habéis conseguido que me interese por él.Creo que si el final merece la pena ese paseo anterior vale el doble.
ResponderEliminarEl final es precioso y te deja una sensación muy agradable.
EliminarEs como un clásico, está lleno de palabras que suenan muy bien.
He visto buenas opiniones de la novela, de momento no creo que la lea, pero tampoco la descarto.
ResponderEliminarBesos
Ahí se queda guardado por si fuera necesario . Es libro manta y sofá.
EliminarBesos
Pues resulta que comencé a leerlo un finde en el pueblo, descansando y relajándome...y me lo dejé cuando me vine, así que se me ha quedado a medias y yo colgada con la historia; no sabía si leerte o no, fíjate, para que no me descubriera nada que no quisiera...pero te he leído, no puedo evitarlo, jajajaja.
ResponderEliminarMe has dejado intrigada, sabía que el final tendría que ser bueno pero ahora se que lo va a ser y la ansiedad me puede, ayyyy, esta cabeza mía...
Besitos cielo, muy buena reseña.
Pues a ver yo si eso te mando un privado y te lo explico todo, jaja, ¿te imaginas?
EliminarPues entonces lo has dejado cuando ya estabas enganchada, así que vas a tener que dar un paseo al pueblo y recuperarlo. Te encantará escuchar a Florence.
La cabeza para llevar los prendedores (decían las monjas del cole). Momento "Érase" .
Besitos, carynet. Muchas gracias.
¿Estás diciendo que estamos locas? jajajaja. Bueno, un poco sí, ahora que no nos oye nadie. Y exigentes, mucho. Bueno, va, exigentes y locas, lo que es, es... jajaja.
ResponderEliminarYa sabes lo que opino del libro y que coincidimos en todo. Florence es la reina de la función, y como una reina llega a ese final. Me ha encantado como escribe este autor, quizás sea por lo que comentas, que tiene un sabor muy clásico... clásico y muy británico.
Tengo apuntada la casa de Hardy para visitarla en el futuro. Va a ser una experiencia extraña... ¿mantendrán los dichosos árboles?
¡Besote!
Sí, un poco se nos va. Y salimos corriendo con estas temáticas pero no nos vale cualquier cosa.
EliminarYo también me apunto a la segunda visita a la casa de Harry, ¿te imaginas que chocamos con la Gertrude? Es que yo tengo la sensación de que ya he estado allí. Los árboles están, por supuesto.
Besote !!
Lo haces sonar interesante, Maja. Tengo algún otro libro de esta editorial y parece que editan buenas obras. Apuntado queda.
ResponderEliminarQuizás aparezca como novedad en nuestra próxima Feria del Libro. Estaré atento.
Besitos clásicos.
¡Feria del libro! Eso sí que suena interesante. La editorial tiene cosas muy chulas , saben escoger y apuestan sobre seguro.
EliminarBesitos feriantes
Qué buena gente Papá Noel que tuvo tanto acierto de traerte el invierno.
ResponderEliminarEl tweed sabía lo que era e incluso al tacto puede que pudiera identificarlo pero ya las calidades, eso es otro nivel. Supongo que después de tocarlo (el de "verdad") una descubre lo que es una cosa bien hecha, como esta novela, hilada y preparada para dar abrigo incluso en clima frío.
Y sí, poner a Thomas Hardy como personaje es partir con ventaja.
Besos de abu primavera
Sí, fue guay, pero es que Papa Noel siempre lo es.
EliminarLo sabía, siempre he pensado que si nadie se quejaba de lo del tweed es porque todo el mundo sabía lo que era. Por la descripción que haces de sensaciones, sí, encaja la novela con ese tejido.
Es que los ingleses que yo he visto eran de sandalias con calcetines y bermudas y algún otro que vi en invierno llevaban vaqueros y cazadora térmica.
Besos de nieta en busca del tweed.
Pues ya lo tenía apuntado por otras reseñas. Pero veo que es un libro con el que hay que tener paciencia. Pero si al final se ve recompensada, ¿hay mejor premio?
ResponderEliminarBesotes!!!
El mejor premio que un lector puede desear, un libro que le deja algo. Es tiempo bien empleado.
EliminarBesotes!!!
No lo sé, Nora, creo que no termino de estar convencida con esta novela. La miré mal en la librería sin motivo aparente y me suelo dejar guiar por ese tipo de intuiciones
ResponderEliminarBesos
A mí eso me pasó con el de Patria, y mira que no tiene ni una mala reseña. Pues nada, se me cruzó y no. Así que te entiendo.
EliminarBesos
Creo que me costaría entrar en la historia por todo lo que has contado. Ahora mismo no es para mí, pero, oye, nunca se sabe ;)
ResponderEliminarBesos!
Pues si no es el momento, para otro invierno. Hay que tener un poco de paciencia pero merece la pena.
EliminarBesos!
No se la razón pero es un libro que no acaba de llamarme la atención.
ResponderEliminarLa razón será tu instinto lector que te dice que no y contra eso no hay nada que podamos hacer, ¡uno menos!
EliminarLo tengo anotado desde que se publicó, pero de momento no he encontrado el momento. Pero ahí sigue, algún día.
ResponderEliminarUn beso ;)
Para momentos de lecturas de sosiego. Es leer por puro placer y sin prisas. Ya llegará.
EliminarUn beso ;)
No te puedes hacer idea de la de veces que he entrado en la web de la editorial para fisgar títulos y nunca me acabo animando.
ResponderEliminarNo la descarto, a ver si me acuerdo del siguiente día que vaya a la librería buscarla y a ver si me dice "llévame" o no.
Besos.
Es cuestión de feeling, lo sabrás cuando la veas. Qué intriga. Yo también me lo pienso mucho, no te creas.
EliminarBesos
Yo creo que en estos momentos no estoy para muchos fuegos lentos. Y no será porque no has pintado bien el caramelo envenenado...aunque siempre hay piedras en el camino. Lo dejo en las que dio eso.
ResponderEliminarBesos
Pues está bien ahí, por si un día te apetece algo sin demasiada acción y más reflexivo. Hay tiempo para todo, que decía la canción.
EliminarBesos
Ir vestido con un traje de tweed es imprescindible para ser una buena víctima o un gran asesino en una novela policíaca clásica... ;-)
ResponderEliminarMe anoto la novela. Me ha llamado la atención eso de que escribe como los clásicos :-)
O para una reunión, nunca se sabe ;).
EliminarEs una novela que bien podría haber escrito una de las Bronté si les hubiera pillado el tiempo.
Disfrútala.
Pues aunque no sea el tipo de novela que suelo leer, me has dejado con muchas ganas de leerlo. No tengo mucha paciencia para el fuego lento, pero algunos lo merecen.
ResponderEliminarBesos!
Para cuando te apetezca cambiar un poco de tercio, de esas visitas que te gusta hacer de vez en cuando a otros géneros.
EliminarBeso Se!
Tengo muchas ganas de leerlo :)
ResponderEliminarDale la oportunidad entonces, no te decepcionará. ;)
Eliminar¡Hola! Está en mis pendientes y tengo muchas ganas^^
ResponderEliminarPor cierto, no conocía tu blog y ya te sigo. Te dejo mi blog por si te gusta también y quieres seguirme: leerenlaluna.blogspot.com.es
Te leo y estaré comentando por aquí :P
Besos:D
¡Hola! Espero que puedas leerlo pronto y lo disfrutes mucho. Bienvenida. En cuanto pueda te devuelvo la visita.
EliminarBesos :D
Es de los que más me llaman de la editorial, pero no he dado el paso. Y vuelvo a anotar, claro XD Un besote.
ResponderEliminarEs un libro muy reflexivo y de ir poco a poco, escuchando casi más que leyendo. Anotado va a la lista interminable.
EliminarUn besote
Pues me gustan las historias cocidas a fuego lento y más si el broche final es perfecto y te deja en comunión con el desarrollo. Sí que es cierto que según leía tu reseña sopesaba si yo sería capaz de continuar en ese camino, si no caería en el abandono; esa duda me pesa, ver veremos qué decido.
ResponderEliminarUn besin
El final te deja completamente satisfecha, redondea la lectura y es perfecto. No es tan fácil encontrar esos finales, a veces da la sensación de que a los escritores les da miedo decepcionarnos y dejan los finales flojos. Sí que eres capaz de andar ese camino y es reconfortante. Solo el principio cuesta un poco más.
EliminarUn besín
Mira que ya leí alguna que otra reseña, y si por un lado me atraía, al mismo tiempo el hecho de no conocer a este célebre autor me echaba un poco para atrás, pensando... ¿Una novela inspirada en la figura de un tío que solo me suena de oídas? No sé yo. Pero leyéndote ahora me doy cuenta de que casi esto sea secundario, residiendo quizá el encanto en los personajes que lo rodean. Siento predilección por las historias inglesas con sabor a clásico, así que esta vez salgo con el libro apuntado. Eres una mala influencia para mi bolsillo, jajaja.
ResponderEliminarUn beso ;)
De hecho yo no he leído nada del autor, y mira, te lo tomas como un personaje más y a leer que ya verás la Florece. Es puro British clásico, lo que se entretiene con el paisaje y el mobiliario es cosa mala.
EliminarUn beso ;)