VOL. I
- Traductores: Pedro Tena, Eduardo Hojman, Javier Calvo
- Tapa blanda: 256 páginas
- Editor: Literatura Random House; Edición: 001 (17 de marzo de 2016)
- Colección: Literatura Random House
- Idioma: Español
- ISBN-10: 8439731450
- ISBN-13: 978-8439731450
VOL. II
- Traductores: Ricard Martínez i Muntada, Eduardo Hojman, Javier Calvo
- Tapa blanda: 246 páginas
- Editor: Literatura Random House; Edición: 001 (17 de marzo de 2016)
- Colección: Literatura Random House
- Idioma: Español
- ISBN-10: 8439731469
- ISBN-13: 978-8439731467
MI OPINIÓN
Detrás de este sugerente título y estas bonitas portadas se encuentra una colección de ensayos de este autor sobre otros autores, sus obras más otros cuatro en los que expone sus ideas respecto a distintos temas.
Ya hay que tener cara, y lo digo por la editorial, sacar esto en dos tomos de tapa blanda con solapa y poco más de 200 páginas cada uno para sablear a los lectores, que cada uno cuesta dieciocho euros, ahora me dirán que así coges solo los que te gusten. Ya, como si en un solo tomo no hubiera cabido todo. Os pongo foto para que los veáis juntos cómo podían ir en uno solo, no me digáis que no se han columpiado.
En fin. Vamos a la lectura. Con un lenguaje muy académico pero fácil de seguir, sin recovecos y sin ponerse pesado, Coetzee va opinando sobre distintos autores. La verdad es que casi todos los ensayos, que no son muy largos, me han parecido interesantes. Desde luego los más útiles y los que me han parecido más productivos son los que tratan sobre libros o autores que ya conozco. En ese sentido he podido comparar la opinión de un experto con la mía. En algunos, hemos coincidido aunque también es verdad que este hombre es muy diplomático, demasiado políticamente correcto incluso para decir que algo no le gusta. Es un poco bienqueda, la verdad. Y también quizás demasiado serio. Ya sé que no son ensayos humorísticos ni sátiras ni nada pero un poco de sal no le hubiera venido mal. Están dirigidos al público en general por lo tanto de la misma forma que ha rebajado seguramente en conocimientos pues podía haber buscado un tono menos seco.
Ahora os hablaré un poco en concreto de algunos de ellos. Empiezo con la que más me gusta a mí que es Némirovsky, empieza haciendo un breve repaso biográfico (en todos lo hace), poco más que lo que puedas encontrar en cualquier contraportada o de lo que incluye la edición de Suite Francesa. Una vez expuesta la información que él creía útil, pasa a analizar sus obras, parándose poco en cada una de ellas y destacando lo que tienen en común, la relación de ella con la madre. También analiza Suite francesa y el momento histórico y cómo afectó a la escritura. No parece que le guste mucho esta autora.
De Sándor Márai no he leído ningún libro pero es de esos eternos pendientes que sabes que algún día leerás, sin embargo, después del breve repaso vital habla de su obra centrándose en los avatares amorosos. No le resta méritos pero tampoco le regala halagos por lo que intuyo que no le gusta. Aunque insisto en que no lo dice claramente.
Gabriel García Márquez también se lleva lo suyo, en este caso se centra en su última novela "Memorias de mis putas tristes" y en el tema del amor perverso. Cuestiona la moralidad del personaje principal, y también cómo el tema ha estado presente en otras obras del autor, cómo lo resuelve y de dónde surge. Según J. M. la cosa ya viene desde de "El amor en tiempos del cólera."
De los nuestros solo ha cogido a Juan Ramón Jiménez y su Platero y yo, poca cosa por no decir nada, solo que el burro era buen personaje y le gusta que sea un burro y no lo humanice. Me da que el sudafricano no nos lee mucho.
Entrando en sus favoritos, tenemos a Gordimer, escritora sudafricana, en su ensayo se centra sobre todo en el paralelismo con Turguéniev y en cómo este fue un referente con su obra Padres e hijos para su compatriota. También deja constancia de que lo que se sabe de Sudáfrica fuera de Sudáfrica viene de los escritores sudafricanos, de la misma forma que ocurría con la Rusia de Turguéniev que tuvo sus problemas cuando le achacaron a él ideas políticas de sus personajes.
Doris Lessing me ha sorprendido. Reniega del supuesto feminismo de sus obras, no entiende e incluso le molesta que El cuaderno dorado sea tomado como símbolo de este movimiento equiparando esta molestia a la que le suponen los críticos literarios a los que califica de "pulgas pegadas a su espalda". De ella cuenta muchas cosas muy interesantes.
A Faulkner le dedica un extenso ensayo de varios capítulos en los que analiza cómo lo ven sus biógrafos y cómo él discrepa con algunos. Trata de exponer su vida objetivamente, desde su infancia hasta cómo se formó a base de lecturas (el instituto lo dejó el primer año) y cómo la guerra lo convirtió en narrador. Hace un repaso a toda su obra, analizándola detenidamente, sus logros, lo mal que le sentó el matrimonio y el desastre de Hollywood.
Con Arthur Miller y su Vidas privadas contrapone las historias escritas a las visuales y las diferencias que hay a la hora de contarlas de una forma u otro.
De Henry Roth destaca su obra Némesis a la que hace un profundo estudio y también explica la repercusión que tuvo en posteriores trabajos.
Gerald Murnane era un católico irlandés criado en Australia, el pobre, todo lo bueno era pecado, así que leía para poder vivir todo lo prohibido, eso le llevó también a crear sus propias historias con el consiguiente disgusto de su familia que lo veía ardiendo ya en las llamas perpetuas del infierno y lo desheredaron por no acabar ellos también allí por reagrupación familiar.
En cuanto a poesía tenemos a Les Murray, que para mí ni frío ni calor y creo que está en la lista porque es australiano. También a Whitman del que hace un interesante análisis de la sexualidad presente en sus poemas, de lo erótico, la homosexualidad y cómo el pobre hombre lidió con todo eso.
A Samuel Beckett le dedica dos ensayos, en el primero expone diferentes visiones de él y en el otro su vida y obra.
Y luego viene Goethe con el desgraciado Werther, menudo traje le corta, desde su corrección por supuesto. Pero ha sido muy interesante y es quizás el más desenfadado y cotilla de todos.
Ya termino, prometido, solo quedan los otros ensayos, el primero que además es el que abre la colección se titula "¿Qué es un clásico?" Vale, pues ya os digo que después de dar quinientos treinta millones de vueltas a la idea, al final no lo dice. Sí que dice que "el clásico se define por la supervivencia".
En La ociosidad en Sudáfrica expone el problema al que se ha enfrentado la filosofía de vida de ciertas tribus con la mentalidad europea. Me ha parecido muy interesante y lo recomiendo. Tiene reflexiones muy curiosas que dan mucho que pensar. Habla del yugo de las comodidades, ahí lo dejo.
El tema de la belleza y los paisajes le sirve en "Lo pintoresco, lo sublime y el paisaje sudafricano" para contraponer de nuevo la visión europea con la sudafricana. También aporta muchas ideas que nos pueden servir para ver las cosas de otra manera independientemente de la opinión que tengamos después, pero al menos contemplar la posibilidad de opciones distintas a la nuestra.
Trabajar con traductores también ha sido una grata sorpresa. Me ha hecho gracia que a él le sorprenda que sus traductores europeos a menudo le consulten cosas pero los japoneses y turcos no, cuando se supone que estos por distancia cultural y lingüística deben encontrarse con más dificultades. Aun así no se queja de sus traducciones, en general, y es un ejercicio de fe ya que él solo se maneja más o menos, en tres idiomas. Pone varios ejemplos de errores. Este os lo recomiendo a todos.
Por último hay uno, el que abre el segundo tomo, que se titula "Erasmo: locura y rivalidad", que no sé a dónde iba a parar.
En conclusión, he aprendido muchas cosas sobre estos autores, creación, cómo sus vidas les inspiran o les condicionan.
AVISO MUY IMPORTANTE: Si vas a leer alguno de los que habla de alguna obra en concreto como el caso de Werther, ve con ojo porque suele poner el final. Cuando abarca más obras como se detiene menos puedes librar, pero si no, que sepas que te vas a llevar un reventón de trama.
PUNTUACIÓN: 4/5 oye tú, aquí también hay gente que escribe muy bien.
Empecemos por el principio, Norah. Ya ha circulado un libro suyo titulado 'Costas extrañas' en el que repartía a diestra y siniestra sus exhortos.
ResponderEliminarNo me agrada que alguien -amparado por un galardón internacional- se arrogue una suerte de pontificado de probos y réprobos conferido simplemente por la trascendencia que el propio galardón supone. En lo personal, me son más valiosos tus comentarios y los de tantos otros lectores, a los que despojo de todo interés personal de trascender, como me parece el caso.
Lo siguiente es que me encantan lo que son capaces de hacer Djokovic, Messi, Fernando Alonso y tantos otros talentosos deportistas. Pero los quiero haciendo lo suyo, ejerciendo sus saberes en aquello a lo que han consagrado su vida. Sus vidas personales no influyen en mi apreciación acerca del talento en su disciplina. A Maradona lo hemos querido por lo que ha sido capaz de hacer en una baldosa, no por sus declaraciones sobre política o religión. A Coetzee lo aprecio por lo que escribe, no por lo que nos venga a decir sobre sus colegas, por más que haya cosas en sus líneas que sean capaces de abrir los ojos a sus lectores.
Por una cuestión de principios, paso de estos volúmenes. Incluso a sabiendas que algo me he de perder.
Un beso grande para vos.
De ese que citas encuentras aquí tres ensayos, el del clásico, Gordimer y Turguéniev y el de Lessing. Veo que te ha cabreado mucho, a mí me pasa lo mismo cuando un autor de éxito se queja del mundo editorial, no lo entiendo ¿qué quiere, si precisamente a él lo han tratado genial? En fin, entiendo que te interese más la obra que la vida de los autores, yo también lo prefiero. Cuando es un autor por el que siento especial debilidad sí me gusta saber cosas pero más que de su vida, de su proceso creativo y de cómo se convirtió en escritor.
EliminarA Coetzee lo leí en Desgracia y ya me conformo, me parece que todo lo tiñe de pesimismo y tragedia y todo tiene que ser durísimo. Por mucho que la vida sea así "siempre hay una grieta por donde se cuela la luz", que cantaba Cohen.
Me quedo con lo aprendido y por supuesto respeto tus principios.
Un beso enorme
Pues totalmente de acuerdo con lo que comentas de la editorial, que forma de sacar dinero al lector... Respecto a los libros, no creo que sean una lectura que vaya a disfrutar así que estos no me los llevo
ResponderEliminarBesos
Yo no lso compraría. Además los han publicado juntos como para que te dé rabia coger uno y dejar el otro.
EliminarEstos van a tener poca acogida, me temo.
Besotes
Pues me pasaré por la biblio y miraré con detenimiento el índice de estos dos (innecesario que fuesen dos) volumenes porque, como te pasa a ti, me gustaría leer los ensayos sobre los autores/obras que conozco. Me gustan este tipo de escritos. Aunque me imagino, por lo que cuentas y por lo poco que conozco al buenazo de Coetzee, que todo serán cosas buenas y que de mojarse poco-poco. ¿No hay ningún español? (que curioso lo de los traductores). Bss
ResponderEliminarSolo Juan Ramón y el burrito. Ha barrido para casa. Yo no pensaba leerlos enteros pero me pudo la curiosidad. También te gustará el de los paisajes. El de traductores es el más ameno.
EliminarBesos
Lo de sacar así en esa edición los libros....meh no loveo del todo bien pero parece que es la moda ahora.
ResponderEliminarEn este caso norah no me los apunto y mejor que ultimamente me apuntaba casi todos los que leías jejej
Un beso!
Cuando les venga la moda de no vender y perder dinero, ya se replantearán las cosas.
ResponderEliminarDale un respiro a la lista, jeje.
Besos
Pues sí que ha sido lista la editorial... No sé si me animaré con estos libros. Si los encuentro en la biblio quizás sí les eche un vistazo. Pero si no, me parece que ahí se va a quedar.
ResponderEliminarBesotes!!!
Puedes hojearlo y leer solo el que te interese, ya que están. ..y si no, pues nada.
EliminarBesos
Las editoriales a veces toman decisiones que les vendrán muy bien económicamente pero que de cara al lector flaco favor les hacen. Pues de lo que has ido comentando unas cosas me llaman mucho la atención y otras menos. Publicar un libro así sin mojarse ni decir lo que realmente se opina es un poco absurdo. Se presupone la opinión, no solamente la exposición. De todos modos si me cae en las manos le echaré un vistazo seguro.
ResponderEliminar¡Besote!
MH
Creo que sus ensayos van más a exponer un tema que a opinar y por eso quedan tan asépticos. Para mojarnos ya estamos nosotros. No veo a Coetzee haciendo un blog de reseñas. Mejor para nosotros. ¿No? Jeje.
EliminarApunta cosas muy interesantes y no pasa nada por echarle un vistazo.
Besos
Pues no me veo con estos dos. Y ya puesta no estoy de acuerdo con algo del contenido que citas. Sobre todo en lo de Gabo.
ResponderEliminarMe imagino por dónde vas, yo también pienso lo mismo respecto a Márquez, hay que diferenciar realidad y ficción.
EliminarHola Norah!
ResponderEliminarTe agradezco la reseña, porque leo casi todo lo que sale de Coeteze, y aún no tengo a éste.
Coincido contigo que es mejor novelista que ensayista y crítico. Yo me compré un libro (Cartas de Navegación, de unas 700 páginas) que son ensayos de cítica literaria y entrevistas. He disfrutado de las entrevistas y no he entendido muchos de los ensayos, confieso. Porque no conozco a los autores reseñados, y porque su lenguaje al criticar se me vuelve demasiado críptico, con demasiados códigos dirigidos -supongo- a una comunidad académica y no al gran público.
Coetzee es un hombre muy intovertido, y hasta tímido. Cuado le dieron el Nobel no recibió a la prensa mundial, y a les contestaba con un mail que era idéntico para todos. Lo crucificaron por eso, y le dijeron de todo menos bonito.
"Verano" es su autobiografía de la adultez y es una genialidad formal, porque es la entrevista de un periodista a quienes lo conocieron en vida, muchas de ellas mujeres -Coetzee en teoría está muerto-. Allí nadie duda en describirlo como un ser con una dificultad de comunicación emocional enorme. Sus alumnos lo tildan de aburrido, y las mujeres (pocas) que pasaron por su vida como alguien que no sabía amar, o no podía. O lo hacía de una manera muy difícil de descifrar, que finalmente las hartaba.
Yo creo que él escribió eso en forma totalmene honesta. No es una sátira, una parodia. No. Coetzee es seco, como sus calcinadas planicies sudafricanas. Y no se tuvo compasión en ese libro. Tampoco me parece que se victimice, ni que haya un exhibicionismo solapado. Escribió sobre lo que más conoce un autor, y le salió algo muy distinto a la autobiografía habitual, no sólo por la originalidad recurso literario, sino por el contenido. Si había un mito respecto de su persona, quedó hecho trizas.
Dicho todo esto, no me sorprende que al juzgar a otros (o a su obra literaria) tenga un registro similar al que usa para juzgarse a sí mismo. Y sea lapidario con algunos.
Bueno, esperaré a leerlo. Como ya conozco su franqueza sin filtros, y como he visto que se la aplica a sí mismo sin compasión, eso no me genera rechazo. Sé de quién viene, y sé -creo saber- que su intención no es difamar, hacer un daño. Simplemente escribe como lo siente, como le sale. El se conoce que es una voz entre muchas, no pretende ponerse en el pedestal. Opina, y le gusta opinar de esa manera. Para él eso es lo que corresponde, se siente en la obligación -casi moral- de decir lo que piensa y que los demás lo interpreten en su contexto.
Bueno, Norah, me alegro de haber podido tener este intercambio contigo a partir de mi "querido" Coetzee. Viene a Argentina dos veces por año y tiene un programa de escritura creativa... con presos, en una cárcel.
Tres hurras por don J. M.
Releo este comentario y veo dos errores de ortografía, que son más de tecleado. Escribir en el móvil, y en la pequeña ventanita que me permite Blogger, entra en la categoría de tortura. Gracias por tu comprensión.
EliminarAquí queda tu comentario para completar la reseña y mi lectura. Ahora entiendo mejor algunas cosas sobre todo en cuanto a la forma de expresarse y esa aparente frialdad. A mí me cuestan sus novelas por lo duras que son, tan alejadas de otras ficciones africanas aunque muchísimo más realistas.
EliminarMe ha parecido curioso lo que cuentas sobre su vida personal y su actitud frente a temas como el amor.
Muchas gracias por tu comentario.
Tranquilo, a todos nos juegan malas pasadas los autocorrectores con vida propia y demás retrocesos tecnológicos.
EliminarNorah, me atrevo a recomendarte lo siguiente si quieres disfrutar de Coetzee. Su primera etapa es reaccionaria contra el apartheid, y contra su propia identidad boer. A esa etapa pertenecen sus primeros libros, que son muy duros, y no dan respiros. A partir de "Foe" comienza a centrarse más en lo literario y menos en la denuncia social. Igual para mí ese es un libro desparejo, experimental -intenta jugar con las identidades del verdadero narrador de Robinson Crusoe-.
ResponderEliminarEn 1990 escribe "La edad de hierro", un libro impactante. Una mujer enferma de cáncer (taaaan fácil Coetzee no te la va a hacer... Ninguno de esus libros es para llevar a la playa, digamos) que enfrenta sola la enfermedad, y que va descubriendo a sus vecinos negros, a un indigente que se instala en su propia casa y le hace de compañía... Ese libro me conmovió y me sigue conmoviendo. Es para leer despacio, disfrutar los párrafos, respirar hondo. Lo releo cada tanto. Siempre me llevo algo.
El otro que me parece un libro de antología es Verano. El el tercero de su autobiografía. Uno pensaría que alguien que escribe TRES libros (aunque no sean largos) autobiográficos tiene un ego paquidérmico. En el caso de JMC yo creo que usa algo que conoce en profundidad y de primera mano para transformarlo en materia literaria. Yo no he leído Infancia -tampoco he leído todos los de la época "dura", no te creas-, sí Juventud, y con Verano me tomó desprevenido. Porque es una obra maestra. Por lo formal: te conté, un periodista que busca datos para una biografía, y todos (son mujeres casi todas) dan sus versiones, a la vez que cuentan sus vidas en su intersección con la de JMC. Muchas voces, distintas, un collage para armar. Y lo segundo es que -sea verdad parcial o completa- la imagen que a uno le queda del difunto Mr. Coetzee es algo muy realista. La de un hombre muy limitado emocionalmente, casi patético sin llegar a lo paródico. Que hace inmensos esfuerzos para contactar con la gente, pero su mejor resultado es literario.
Una obra impactante. Muy inteligente, muy humana. Muy descarnada, sin concesiones. Yo creo que si alguien escribiera todo eso de mí me sentiría difamado. Si yo tuviera esas limitaciones preferiría que un manto de compasión las tapara. JMC hace de sus miserias un acto literario. Y a todos los que no lo conocemos personalmente nos deja la duda si eso es ficción, parcial o total. Te permite que tú, lector, juegues con el texto. Y eso, a mi modo de ver, es la gran literatura.
Bueno, Norah, te deseo suerte con JMC. Saludos
Apunto las recomendaciones y ya dejaré en mi rincón lo que dé de sí la lectura. Y conociéndome sé que necesitaré esa suerte que me deseas para bordarlo.
EliminarSaludos
Yo, yo!!!
ResponderEliminarMe han encantado y son para comentar, eh? dan para rato porque permiten la libre opinión de quien los ha leído. Vale, un poco si que se pone altivo en algunos momentos, pero se le perdona a Coetzee, no me digas que no faltaba él en esa lista que hace
Por cierto que me encanta justo al principio del primero cuando habla de que los clásicos son los que resisten las críticas y hace esa suerte de distinción entre críticas
Besos
Sí!!!yo luego me desorienté un poco con el símil con la música que me pareció demasiado largo pero me gustó también cuando dice que la música cuida a los suyos y la literatura los olvida.
EliminarDan para comentar mucho, son ideales para un club de lectura y también para los que reseñamos. También está interesante lo que dice de las descripciones de paisajes, sobre todo el significado de las palabras según la cultura.
El que más me gustó fue el de Gordimer y el de los traductores.
Me encantan estos comentarios, tranquila.
Besos
Perdón por el testamento
ResponderEliminarNo hay nada que perdonar.
EliminarPues yo creo que este no me lo llevo. No suelo leer muchos ensayos, y prefiero leer a los autores y sacar mis propias conclusiones, no que este señor me cuente lo que a él le parece, no sé, me ha caído mal, así ya de entrada, lo siento :)
ResponderEliminarBesos!
Jajaja, qué temperamento. Pero te entiendo porque yo a veces también me cruzo con determinados autores y no hay manera.
EliminarYo tampoco suelo leer ensayos pero estos como eran de literatura me llamaron la atención.
Besos
Este tipo de ensayos me parecen muy interesantes (aunque lo que leo de este género, suele ser más sobre cine), me llaman bastante la atención.
ResponderEliminarAHORA, me parece un timo dividirlo en dos...
Besotes
Los de cine molan mucho. Yo pensaba que leyéndolos iban a perder gracia las pelis pero las hace más interesantes .
EliminarEl timo es para darles con los libros en la cabeza.
Besotes
En verdad creo que podría llegar a gustarme, pues son casi los únicos ensayos que tolero, los basados en libros y sus autores. De todas formas como no he leído a ninguno de los autores que menciona (salvo el de nuestro querido burrito, jajaja), no me parece justo leerlo.
ResponderEliminarIgualmente, de todos los autores citados, quizá el que más me llame sea Faulkner.
Un beso ;)
Es que ensayo como no sea de in tema que te interese mucho puede ser insufrible. No los he puesto todos pero vamos que los que no he nombrado a mí no me sonaban de nada.
EliminarPues yo el burrito no, nunca. Mira que con la poesía me llevo fatal.
Tiene cosas intetesantes y sí, Faulkner lo veo como para ti.
Un beso ;)
Mira, estos los dejé pasar. Y ahora me alegro, los bienqueda me ponen nerviosa, jejeje. Aunque lo que dices que comenta de Lessing me ha picado mucho. Mecachis... :)
ResponderEliminarUn abrazo
Supongo que prefería quedar como más profesional lo que pasa que eso a veces acaba por dar sensación de frialdad.
EliminarLo de Lessing es muy curioso, cómo renegaba y por qué de su etiqueta de feminista.
Siempre puedes ir a la biblio o a la librería y leer solo ese.
Un abrazo